Muy interesante la entrevista que encuentro en La Vanguardia a través de Luis Carrasco
Sólo nos queda un camino: competir con innovación.
¿Cómo?
Revolucionando la organización empresarial: dando poder, confianza y libertad al equipo y despertando su creatividad reprimida: y sabrán estar a la altura. Lo hacen.¿Puede ser más específico?
Hoy al empleado lo tenemos muy controlado, pero poco «accountable» (no le pedimos que rinda cuentas). Y debe ser al revés. Que haga lo que quiera para lograr crear valor (que él decida cómo lo logra), pero que rinda. Las jerarquías deben ser menos intensas y verticales y más difusas y horizontales: yo no respondo de la calidad de mi investigación ante el decano, sino ante mis colegas.
P.D. Viene muy al caso como me recordaba @bergoncini esta entrada de @odilas