Ayer por un error que no pienso explicar perdi los datos que un nuevo colega había dejado en un comentario en este blog. No encuentro forma de recueprarlos por lo que le pido a través de está entrada que vuelva a intentar contactar conmigo. A todos los demás pediros disculpas por estas molestias.
Hombre, que si tachas «que no pienso explicar» entiéndese que SI vas a explicar… ¿y la explicación, entonces?
Ok, es broma, pero mi alma de vieja comadrona esperaba algún tipo de anécdota graciosa respecto de la pérdida…
no se, la verdad es que casi no me di cuenta. El Akismet de WP lo mandó a spam y allí yo pulse a «Aprobar» el mensaje desapareció de la lista de spam. Quedaba otro y pulse «borrar todo el spam» y me respondió «2 mensajes borrados» !¿Cómo que dos?!
Ridículo, ya lo sé.
¡Espeluznante! Mi curiosidad está ahora saciada… pero tengo una pregunta más difícil: ¿Por qué sigo comentando pequeñeces aquí en vez de ir a trabajar?